Cómo superar el miedo a la oscuridad en los niños

A lo largo de la historia, uno de los temores más generalizados entre la población ha sido siempre el miedo a la oscuridad. Este sentimiento se asocia a varios factores, entre los que destacan el miedo a lo desconocido, a la soledad o incluso a la muerte. El temor a quedarse a oscuras suele aparecer en edades tempranas y es tan común, que se ha convertido en un temor casi universal.

La palabra miedo se define como una perturbación angustiosa del ánimo por un riesgo o daño real o imaginario. Además, el concepto también hace referencia al recelo o aprensión que alguien tiene de que le suceda algo contrario a lo que desea. Se trata de una emoción primaria que se caracteriza por un intenso sentimiento negativo, provocado por la percepción de sentirse en peligro.

En los niños, este sentimiento se agudiza enormemente, especialmente cuando tienen entre tres y cinco años, aunque puede alargarse hasta los 8 ó 9. Este miedo puede aparecer después de que el niño haya escuchado algún cuento, o haya visto una película o un libro que le haya impactado. Cualquier imagen, experiencia, o simplemente su imaginación, puede despertarle ese temor.

El miedo a la oscuridad suele aparecer a la hora de acostarse, cuando tiene que apagar la luz y se queda solo en su dormitorio. El pequeño suele resistirse a que llegue ese momento, alargando el día todo lo que puede. La razón de ello, puede deberse a que el niño asocia el dormir con que ya no puede seguir jugando, ni hacer nada divertido y quiere evitar que eso ocurra, o puede que las razones vayan más allá, y que el niño, en realidad, sientan temor de quedarse solo ante la oscuridad.

Por eso, el primer paso a seguir es valorar si realmente el niño tiene miedo, o es una excusa para no irse a la cama. Para ello, basta con observar si se siente a gusto en su habitación o, por el contrario, se muestra inquieto.

Si observamos que realmente nuestro hijo se inclina más por esta segunda razón, debemos estar atentos, para que el miedo no se convierta en fobia u obsesión. Es importante ser comprensivos e intentar hablar con él para averiguar qué es lo que le produce ese miedo, para intentar paliarlo lo más pronto posible y, si no se soluciona, lo mejor es acudir a un especialista.

Cómo superar el miedo a la oscuridad

Generalmente, el miedo a la oscuridad está asociado al temor a lo desconocido. La penumbra crea en los niños un sentimiento de inseguridad que hace volar su imaginación, creyendo que le van a pasar cosas malas. En este sentido, hasta el más pequeño ruido se convierte en un problema terrorífico.

Existen distintas técnicas para que el niño vaya superando sus miedos, y nuestro papel como padres es importantísimo. Debemos tratar el tema con mucho respeto, sin ridiculizar al niño en ningún momento ni quitarle importancia al problema, pero haciéndole ver que su miedo no tiene justificación.

Es importante escucharle e intentar que nos explique qué es lo que realmente le asusta. Después debemos razonar con él, poniéndonos en su lugar e intentando quitarle importancia a aquello que le produce miedo, aunque no ignorándolo. Para ello, podemos explicarle que nosotros mismos sufrimos esos miedos cuando éramos pequeños y lo superamos sin problemas.

Los especialistas recomiendan que jugar con la oscuridad es la mejor forma de vencer el miedo. Es decir, se trata de acostumbrar a los niños a la oscuridad, asociándola con actividades divertidas, como jugar al escondite o al “pilla pilla”. También podemos ayudarles si jugamos con ellos a contarles cuentos o historias con las luces apagadas.

Lo importante es que el niño se sienta tranquilo y relajado cuando se vaya a la cama. Para ello, lo mejor es seguir una rutina antes de acostarse para que se acostumbre a descansar tranquilamente. Un ejemplo de ello sería: darle un baño relajante, cenar ligero, leerle un cuento, darle un beso y a dormir. En definitiva, se trata de seguir unas pautas diarias para que el niño se acostumbre a que la hora de dormir es una tarea más de la rutina diaria.

Y muy importante, debemos evitar dormir con nuestro hijo toda la noche, porque lo asociará como un signo de protección frente a algún problema que realmente no existe. Si está muy asustado, podemos quedarnos un rato con él para que se tranquilice y concilie el sueño, pero nunca toda la noche y, mucho menos, repetir.

Si lo hacemos, el niño se acostumbrará y reclamará que durmamos con él todos los días, al no hacerlo, puede producirse el efecto contrario, aumentando sus temores e inseguridades.

Algunos consejos prácticos

· No menosprecies sus temores

· Sé comprensivo y ten paciencia

· Fomenta la conversación para que se desahogue y duerma tranquilo

· Instala pequeñas luces en los enchufes para que no esté totalmente a oscuras

· Regálale un peluche o un muñeco para que le haga compañía y se sienta más arropado

· No cierres las puertas de las habitaciones

· Anímalo a jugar con la oscuridad: al escondite, los juegos de sombras, etc.

Comentarios

Hola: Os cuento mi historia :
En nuestra casa tuvimos bastantes problemas con el miedo a dormir. Mi hija mayor es bastante sensible a todo lo que ve y le oye y por eso a las noches le costaba bastante conciliar el sueño.
También en el colegio los otros compañeros le contaban historias " de miedo" tales como que había ladrones en el pueblo, que a las noches aparecían unos gigantes y se llevaban a los niños o también que un niño aseguraba que donde vivimos hay tarántulas.
Con todos estos entrantes lo que nos pasaba es que mi hija se iba a la cama y no se podría dormir; si oía un ruido pensaba que era algún ladrón que andaba por casa o pensaba que alguna tarántula había entrado en casa. La pobre se quedaba toda atemorizada en su cama hasta que no podía soportarlo más y se levantaba y se metía en nuestra cama.
Empecé a buscar por cuentos infantiles que hablasen sobre el miedo y como superarlo pero no encontré nada interesante.
Al final decidí escribir un cuento sobre el miedo y se lo conté y nos funcionó tan bien que mi hija empezó a dormir bien por las noche.
Fue tal el subidón que me junté con una ilustradora y hemos escrito un cuento que le hemos llamado “Nitari y el miedo”. Ahora estoy buscando una Editorial que se anime a publicarlo. Toda la historia la cuento en la página web www.nitari.es
Si queréis me mandáis un correo a elmundodenitari@gmail.com y os mando gratis el cuento en formato PDF. Sin ningún coste.
Un saludo,
Jose Angel Fulgencio

Existe un método denominado AUTOTRANSFORMACION creado por un gran maestro chino llamado Vicente Hao Chin que funciona. Lo puedes encontrar en internet. Suerte

Añadir nuevo comentario

Plain text

  • No se permiten etiquetas HTML.
  • Saltos automáticos de líneas y de párrafos.