Habas. Higos. Hinojo. Huevos

Huevo: Contienen un 81% de sales minerales ácidas. La forma más digerible es pasado por agua o cocido muy ligeramente; además de esta forma no pierde parte de la grasa que contienen ni el 30% de sus sales minerales y la totalidad de las vitaminas. Constituye uno de los alimentos más nutritivos por su riqueza en proteínas, grasas y fosfolípidos, sales minerales y vitaminas A y D. Su digestión debido a las grasas que contienen puede ser, a veces, bastante difícil por lo que no conviene abusar de ellos.

Habas: Poseen un 51% de sales alcalinas. Son un alimento sano y de digestión ligera. Las secas pierden su vitamina C, pero son ricas en hidratos de carbono, hierro y calcio. Su inconveniente es que produce flatulencias. La tiernas poseen el factor colima, sustancia lipotropa que juega un papel importante en el metabolismo de las grasas y previene la degeneración adiposa del hígado, también contra la adherencia de colesterol en las arterias.

Higos: Es uno de los alimentos más alcalinizantes. Por sus azúcares naturales vivo, son un alimento tónico, energético, de gran valor biológico. Son muy digeribles. Tienen una suave acción laxante por las semillas que contienen. Junto con los dátiles y las pasas son los frutos béquicos por excelencia. Su decocción se utilizaba también como de inflamaciones bucales, anginas, etc. Los higos abiertos aplicados sobre flemones y callos, los ablanda y los resuelve. Las cataplasmas calientes de higos tiernos o secos calman el dolor de las quemaduras, forúnculos, abscesos, herpes, tumores inflamados, haciéndolos madurar.

Hinojo: Rico en hierro es refrescante, diurético y ejerce una acción tónica sobre el sistema nervioso.