El efecto de la desesperanza
El doctor Stephen L. Stern, del departamento de Psiquiatría del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas, en San Antonio (EE.UU.) preguntó: “¿Por qué algunas personas fallecen, mientras que otras, quizás igual de enfermas, siguen viviendo?”, y contesta: “Parte de la respuesta a esa pregunta quizás radique en la presencia o la ausencia de esperanza”.
Un estudio realizado entre 800 estadounidenses ancianos hace suponer que la desesperanza a menudo conduce a una muerte prematura. Ahora bien, los investigadores señalan que los efectos varían mucho de una persona a otra, dependiendo de factores como las experiencias de la infancia, la depresión, los antecedentes culturales y la seguridad económica.
La tristeza de la jubilación
La jubilación anticipada tiene sus ventajas, pero también se cobra un alto precio emocional. El periódico brasileño Diário de Pernambuco dio a conocer los problemas que afligen a los empleados públicos retirados: “insatisfacción, irritabilidad, inseguridad, pérdida de identidad, depresión y la sensación de que su mundo se desmorona”.
Según el geriatra Guido Schachnik, “no es raro que los hombres jubilados anticipadamente se refugien en la bebida ni que las mujeres se habitúen a algún medicamento”. Quienes piensen en el retiro deberían “evitar endeudarse y buscar capacitación y orientación para no caer en un pozo sin fondo”, aconseja la psicóloga Graça Santos.
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