Cómo escoger nuestras gafas de sol

Las gafas de sol nos protegen de las radiaciones nocivas, pero, a la hora de utilizarlas debemos tener en cuenta una serie de recomendaciones.

La primavera, el verano, con el aumento de horas de luz y por tanto de sol, nos permite pasar más horas al aire libre. A pesar de que el sol es una fuente de vida y salud, presenta un componente de riesgo si no protegemos de forma adecuada las zonas corporales más sensibles, como la piel y los ojos. Los efectos de la radiación solar nos afectan a todos, aunque de manera especial a los niños, las personas que trabajan al aire libre y los pacientes operados de cataratas. Por lo tanto, la elección de unas gafas de sol no debe estar basada en criterios solamente estéticos, sino sanitarios.

Nos todas las gafas de sol son iguales. Del mismo modo,  que cada persona tiene su estilo de vida diferente, las gafas de sol deben adaptarse a distintas necesidades de protección ocular. De modo que el asesoramiento del óptico-optometrista o profesional de salud ocular nos ayudará a escoger el tipo de gafas de sol más adecuadas en función de nuestras necesidades, actividades cotidianas y de ocio o estilo de vida.

Cómo seleccionar nuestras gafas de sol

La clave para escoger las gafas de sol reside en la categoría del filtro solar, ya que una lente oscura no garantiza un mayor grado de protección frente a la radiación ultravioleta (UV). Las características de las distintas categorías son las siguientes:

Lentes de categoría 0 son muy claras, por lo que su uso debe limitarse al interior o días de cielo cubierto.

Las lentes de categoría 1, ligeramente coloreadas, están indicadas para los días con luminosidad solar ligera.

La lentes de categoría 2, medianamente coloreadas, deben utilizarse en días de luminosidad solar mediana.

Las lentes de categoría 3 son muy coloreadas, por lo que son las más recomendables para la luminosidad solar fuerte, propia de las zonas de playa y montaña.

Las lentes de categoría 4, son muy oscuras, sólo deben utilizarse en situaciones de luminosidad extrema, como cuando se practica esquí o actividades de alta montaña.

En cuanto al color, el óptico-optometrista nos recomendará el color más adecuado de las lentes en función de las necesidades del usuario:

El verde ofrece una percepción de colores con muy pocas alteraciones, reduciendo la luz sin interferir en la claridad de la visión. Es recomendable para deportes náuticos e hipermetropía.

El marrón filtra las radiaciones azules y aumenta el contraste y la profundidad de campo, por lo que está indicado para los deportes al aire libre y las personas miopes.

El color amarillo no es recomendable para la conducción en días soleados, ya que puede provocar errores en la percepción de las luces de los semáforos. Sin embargo, mejora el contraste en días nubosos, brumosos y con niebla.

El color gris transmite uniformemente la luz a través del espectro y respeta mejor los colores naturales, por lo que es una buena elección para las personas que tienen que conducir.

El naranja es el color más adecuado en condiciones de baja luminosidad como la conducción nocturna o con niebla, ya que aumenta los niveles de contraste, pero no es apto para el uso solar.

Además del tema de los colores a escoger hay que tener en cuenta que las monturas más apropiadas son las que cubren los laterales del ojo, porque evitan que entre la radiación solar. Con unas gafas pequeñas, los párpados quedan muy al descubierto ante la radiación nociva.

Cuándo utilizar las gafas de sol

El uso de las gafas de sol es especialmente recomendable:

Durante la horas centrales del día.

Al atardecer y anochecer, cuando la luz del sol llega de forma más perpendicular.

En las zonas altas, dado que la altitud multiplica la intensidad de la radiación (uno 10% para cada mil metros de altura).

En la playa, debido a que la arena refleja un 30% de la radiación. Un campo de hierba, por ejemplo, sólo refleja el 3%.

Cuando existe nubosidad, ya que parte de la radiación UV traspasa la barrera de nubes.

Cuanto más cerca se esté del ecuador.

El uso de las gafas de sol a la hora de conducir

Las gafas de sol más recomendadas para la conducción son las que tienen un filtro solar de categoría inferior a 4.

El color preferible para los cristales es el gris, ya que transmite uniformemente la luz a través del espectro y respeta mejor los colores naturales.

El cristal polarizado evita los reflejos más molestos del sol.

Si se circula en motocicletas, los conductores deben llevar gafas de sol que sean los suficientemente envolventes para impedir que las partículas de polvo u otros cuerpos extraños penetren en los ojos, con el riesgo que eso conlleva.

No se deben utilizar gafas de sol para conducir por la noche, salvo las de categoría 0.

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