La compra y el uso de productos de nutrición deportiva se están volviendo cada vez más comunes. Los hábitos de consumo han cambiado en los últimos años, ya que los consumidores han adoptado por un enfoque proactivo hacia una alimentación más saludable. De hecho, es un tipo de suplementación que probablemente siga creciendo en los próximos meses.
Salta a la vista que el COVID-19 ha provocado que el aumento sea más pronunciado. Esto es porque la pandemia ha acelerado el deseo de llevar un estilo de vida más sano, minimizando la vulnerabilidad a ciertas enfermedades, con el fin de reforzar el sistema inmunológico y proteger las defensas del organismo.
Alternativas nutritivas y saludables
Durante los últimos cinco años, los productos de nutrición deportiva se han ido convirtiendo en un elemento habitual en tiendas físicas y comercios online. Este cambio no ha sido impulsado por los fanáticos del gimnasio, sino por los consumidores cotidianos que buscaban opciones más saludables para su rutina. Según una investigación realizada en 2019, el 95% de los consumidores ha comprado algún tipo de producto de nutrición deportiva al menos una vez durante el último año. Cabe destacar que es un dato sesgado, ya que muchos consumidores confesaron haber comprado una bebida deportiva o energética.
Por otra parte, más de la mitad (51%) de los consumidores encuestados afirmaron que habían pasado de comer bocadillos y chocolatinas para decantarse por alternativas más saludables, altas en proteínas y bajas en azúcar. Estos consumidores no deseaban mejorar su apariencia física o sus capacidades atléticas, más bien buscaban productos considerados “libres de culpa” y convenientemente nutritivos.
El apoyo de la nutrición deportiva
De cara a los resultados de la investigación, los consumidores ya eran conscientes de su estado de salud antes de la pandemia, pero el COVID-19 ha acelerado las preocupaciones. Por ejemplo, en la investigación de 2021, el 65% de los encuestados reconocieron que se han vuelto más conscientes de su salud inmunológica. Así mismo, el 76% de los participantes afirmaron que estaban planeando comer y beber de manera más sana debido al virus. Por otro lado, hasta un 35% de los encuestados planean aumentar la cantidad de actividad física una vez que el virus haya desaparecido.
Concretamente, el 44% de los consumidores están aumentando su ingesta de productos funcionales y fortificados con alto contenido de ingredientes como proteínas. Destacan aspectos como la asequibilidad, el sabor y la textura de los productos nutricionales. Esto es porque consideran incorporarlos regularmente en sus dietas.
Conclusiones
Los diferentes confinamientos a los que nos hemos tenido que enfrentarnos en los últimos meses han hecho que nos planteemos algunos temas relacionados con la salud y el bienestar. La pandemia no solo repercute en sanidad y economía, también lo ha hecho en nuestra rutina alimenticia.
Ahora tendemos a cuidar más nuestro sistema inmune y, como apuntan los últimos estudios realizados, estamos más atentos al cuidado físico, para que el organismo esté en alerta en caso de que este u otro virus pretenda apoderarse de nuestras defensas.
Referencias
Hendrickson BS, Stephens RE, Chang JV, Amburn JM, Pierotti LL, Johnson JL, Hyden JC, Johnson JN, Philip RR. Cardiovascular Evaluation After COVID-19 in 137 Collegiate Athletes: Results of an Algorithm-Guided Screening. Circulation. 2021 May 11;143(19):1926-1928.
Gonzalez JT, Wallis GA. Carb-conscious: the role of carbohydrate intake in recovery from exercise. Curr Opin Clin Nutr Metab Care. 2021 May 10.
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