OSTEOPATIA: PRINCIPIOS FUNDAMENTALESSiguiendo las enseñanzas de Still, y coincidiendo con la opinión de grandes expertos en la materia, entre los cuales se encuentra el Comité Americano de la Terminología Osteopática, podremos decir con la intención de hacer una definición correcta de la osteopatía, que es una terapia médica basada en la teoría de que el cuerpo es un organismo vital donde estructura y función están relacionadas y guardan una estrecha interacción.
Para la osteopatía la enfermedad es consecuencia pues de una alteración en la estructura para condicionar la función. La terapia Osteopática se basa en la restauración de dichas anomalías mediante la manipulación.
La medicina Osteopática basa su concepto en cuatro grandes principios.
1º.- La estructura gobierna la función.
2º.- La unidad del cuerpo.
3º.- La autocuración.
4º.- La ley de la arteria.
Así pues, tenemos que la adecuada función de todos los elementos de nuestro organismo depende de una correcta situación y normalidad mecánica de nuestro sistema estructural.
La estructura gobierna la función
Es sabido, por ejemplo, que una fijación en algún segmento vertebral causa una hipermovilidad en las articulaciones próximas. Ésta irrita el disco y al mismo tiempo afecta al nervio raquídeo; y a consecuencia de ello se ve comprometida la adecuada función de determinados órganos, músculos, ligamentos, etc. Vemos entonces como la estructura gobierna la función. Este principio tiene una naturaleza simple, pero de gran importancia.
La unidad del cuerpo
El ejemplo patológico expuesto anteriormente demuestra que la unidad del cuerpo es un hecho que no se puede cuestionar, y por lo tanto ignorar. La estrecha relación que existe entre las diferentes estructuras corporales (esqueleto, músculos, arterias, ligamentos, tejido facial, etc.) es importante tenerlo en cuenta, y con ello comprenderemos como una lesión Osteopática puede desencadenar otras “lesiones” adaptativas o de compensación o simplemente funcionales en otra parte de nuestra estructura corporal.
La autocuración
Si en una lesión Osteopática hacemos un acertado diagnóstico y una adecuada manipulación que vuelva a dejar libre la escasez de movilidad de los conductos nerviosos y vasculares, “déjalo”, la autocuración hará el resto. Si se le prestan todos los medios necesarios, el organismo tiene capacidad suficiente para curarse.
La ley de la arteria
El cuarto y último principio, la ley de la arteria queda reflejada en los conceptos anteriormente citados. Una arteria libre podrá aportar sangre y en consecuencia nutrientes y elementos vitales para nuestro organismo. Si su función se limita, todo el sistema circulatorio, venoso y linfático ralentizará su función, y en consecuencia afectará de forma negativa a nuestra economía orgánica.
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