Biorrespiración. Salud de la vida emocional

Definición: La palabra “biorrespiración” significa “repiración de la vida”.

Esta forma de respirar permite al organismo librarse de las tensiones excesivas que existen en el interior del organismo, incluso aunque no tengamos conciencia de ello. Favorece también los desbloqueos emocionales haciendo resurgir emociones antiguas, incluso algunas que creíamos ya superadas. De modo que la “biorrespiración”, al igual que el ayuno, es una técnica revitalizadora de orden subconsciente.

Después de las muchas sesiones de “biorrespiracioón” efectuadas notamos que la “biiorrespiración” está muy relacionada con:

- Las tensiones corporales
- La vida emocional
- La respiración humana
- El hipotálamo:cerebro emocional
- La sangre: reguladora de la vida emocional.

Las tensiones corporales
Por lo general, las tensiones corporales provienen de un exceso de ácido orgánico en el cuerpo. Un organismo en estado de acidosis permanente tiene una tendencia maracada hacia la elaboración de tensiones. De ahí la necesidad de una alimentación vegetariana, alcalina, que nos provea abundancia de alimentos ricos en sales minerales.

A parte de la alimentación, el masaje energético y los ejercicios físicos, la “biorrespiración” permite liberar esas tensiones al expulsar de la sangre un exceso de ácido carbónico.

La vida emocional
La vida emocional condiciona en gran medida nuestro comportamiento; de ahí la necesidad de reflexionar sobre la forma en que se desarrolla y observar cuáles son sus componentes.

Las muestras de atención
Nuestra vida emocional necesita muestras de atención, lo mismo que necesita diversas satisfacciones espirituales, intelectuales, materiales y otras.

Las muestra de atención se expresan en términos de intercambio. Las damos al prójimo y recibimos las suyas. Debemos ser capaces de aceptar las que nos llegan de otros y rechazarlas si no nos convienen.

Los juegos
Los “juegos” representan lo que queremos o debemos hacer para existir. El juego puede ser escogido --lo habitual en los niños-- o soportado: por ejemplo “el trabajo”.

El juego es vital para nuestro equilibrio, de manera que será necesario compensar el “juego” del trabajo que realizamos, con un pasatiempo favorito o actividad secundaria que nos de satisfacción, compensación, equilibrio. Los juegos deben ser conocidos, admitidos y respetados. Los juegos clandestinos son siempre fuente de tensión.

Los sentimientos
Un sentimiento es una reacción psicológica asociada a un pensamiento. Podemos clasificar los sentimientos en cuatro grandes grupos:

- el miedo (inquietud, angustia)
- la tristeza (taciturnidad, pena, duelo)
- la cólera (irritación, furor, rabia)
- la alegría (serenidad, entusiasmo, plenitud).

Siempre que aparece un sentimiento negativo debemos descargar la intensiidad emocional que sentimos. Ante este hecho pueden producirse tres situaciones principales:

1.- La descarga es normal y la intensidad emocional se evacúa razonablemente.
2.- La descarga se prolonga anormalmente. Dificultad en evacuar el sentimiento cargado, lo cual ya es fuente de problemas.
3.- La descarga no se efectúa. Se produce entonces un bloqueo emocional muy perjudicial para el equilibrio del organismo.

El objetivo de la biorrespiración consistirá en restablecer las descargas emocionales que no han podido realizarse normalmente y en liberar al organismo de las tensiones que lo encadenan y que provocan pérdidad de energía.

La respiración humana
Dentro de todo el ámbito de la respiración nos interesa la siguiente conclusión:
La hemoglobina, que transporta el oxígeno, solo actúa en la proporción de ¼ respecto al transporte del gas carbónico. En cambio, las sales minerales y proteinas es muy importante, ya que participan en la proporción de ¾ en la evacuación del gas carbónico hacia los pulmones.

Es este gas carbónico acumulado en la sangre lo que acidifica la sangre, provocando un desplazamiento del pH sanguíneo hacia la acidez. Ello acarrea ciertas inhibiciones, en especial a nivel del hipotálamo.

El hipotálamo: cerebro emocional
Es el cerebro de la vida vegetativa, que rige la expresión de las emociones. Las reacciones viscerales ligadas a la expresión de las emociones son provocadas por influjos de origen hipotalámico:

- rubor o palidez que proceden de la dilatación o contracción de los capilares.
- modificación del diámetro de la pupila.
- aparición de las lágrimas.
- relajamiento de los esfínteres.
- transpiración.
- erizamiento de los pelos, etc...

De modo que la vida emocional está colocada bajo el control del hipotálamo y es ayudada por los influjos procedentes del tálamo o del rinencéfalo.

La sangre, reguladora de la vida emocional
Es el pH sanguíneo el que nos interesa observar a la hora de cuidar nuestra vida emocional. Cuando el pH es normal (7,35), el hipotálamo -nuestro cerebro emocional- es provisto de una sangre que le deja sus facultades normales de reacción. Si hemos sufrido un fuerte sentimiento se producirá una descarga normal sin ningún acúmulo tensorial.

Pero si el pH se vuelve ligeramente más ácido que lo normal (7.32, 7.20, etc..), entonces la descarga emocional se realiza mucho más lentamente. Si el pH sigue una tendencia más ácida, se hace más manifiesta la inclinación hacia el bloqueo emocional y la retención de tensiones.

Inversamente, cuando el pH posee una ligera tendencia más alcalina (7.36, 7.40, etc..), la actividad del hipotálamo se acentúa, produciéndose entonces subidas tensioriales aceleradas (tensiones que a veces eran antes insospechables) y desbloqueos emocionales acentuados.

De modo que la “biorrespiración” provoca una hiperventilación de los pulmones y una descarga del gas carbónico haciendo que el pH sanguínero sea más alcalino

La práctica de la “biorrespiración”
Normalmente antes de una sesión de biorrespiración se realizan unos ejercicios de “indeliberación” que nos ayudan a precisar nuestra indentidad corporal; es decir, estamos más al tanto de nuestra vida corporal.

Estos ejercicios pueden estar relacionados con nuestro arraigo al suelo, nuestro espacio aéreo, nuestra gravedad, los sonidos que emitimos y nuestros sentidos.

Una vez colocada la persona en la posición más cómoda posible y con una temperatura agradable se inicia la “biorrespiración”

Se trata de hacer que sucedan sin interrupción, las inspiraciones y las expiraciones. Aunque lo normal suele ser la respiración por la nariz, se aconseja que se haga por la boca. Después de unos minutos el practicante entra en una respiración involuntaria, decidida por el subconsciente. Se dice entonces que se entra en la fase de “respiración con piloto automático”. En estos momentos la necesidad de respìrar prevalece sobre una eventual decisión de deterner la respiración.

Estas sesiones de “biorrespiración” pueden durar de treinta a sesenta minutos e incluso más, dependiendo de las posibilidades de cada persona.

Es durante estas sesiones en las cuales se producen la liberación de tensiones acumuladas por medio de dolores y seguidos por momentos de relajación y satisfacción.

Las descargas emocionales también se producen como verdaderos torrentes que salen a la superficie. Es difícil que en la primera sesión se produzcan todas estas descargas de modo que se necesitan de 5 a 7 sesiones de dos horas de duración cada día para avanzar en el trabajo de desbloqueo emocional.

Para más información lea el libro:
"La biorrespiración" de DESIRE MERIEN