Levadura de cerveza: Propiedades

La levadura de cerveza es un alimento presentado en forma de pequeñas partículas amarillo doradas de un saber agradable que contiene todos los aminoácidos necesarios para la nutrición humana.

El análisis de aminoácidos contenido en las levaduras permite prever su calidad de alimentos nitrogenados. La experiencia fisiológica realizada en vivo confirma esta afirmación.

Con ayuda de un método basado en la determinación de los balances de nitrógeno que permite asignar un coeficiente a cada prótido y por lo tanto proceder a una clasificación relativa, Mitchell atribuye a las levaduras un valor biológico de 80, intermediario entre el valor biológico de la carne o de la leche (100) y el de las leguminosas (50, 60). Por consiguiente las levaduras se aproximan mucho a las proteínas animales.
 

La levadura seca es la fuente más rica que existe en vitaminas del complejo B, incluye otras vitaminas y sin duda alguna contiene además otros factores desconocidos.
 

Componentes y propiedades de la levadura de cerveza

La levadura de cerveza es la fuente natural más rica en vitaminas del complejo B estando incluidas todas las conocidas y una serie de factores y vitaminas que se siguen descubriendo. Debido a que se encuentran asociadas a otros factores catalíticos, se crean una serie de reacciones sinérgicas que se realizan entre factores distintos, o entre vitaminas y hormonas, o entre vitaminas y aminoácidos indispensables, complementándose sus acciones. Por lo tanto, es conveniente utilizar las fuentes naturales, cuyo campo de acción es más extenso, más armonioso y más fisiológico que las posibilidades que ofrecen las vitaminas sintéticas.

Pero además la levadura de cerveza es rica en hierro, cromo y otros minerales que fortalecen a los jóvenes en su edad de crecimiento y es muy útil para luchar contra las anemias.

Por su alto contenido en vitamina B la levadura de cerveza es muy adecuada para combatir los problemas de la piel como heridas, eccemas, quemaduras; así como trastornos nerviosos (estrés, ansiedad, nerviosismo).
 

Las levaduras secas contra las frescas

La utilización o asimilación de las levaduras frescas es mediocre, pues los fermentos digestivos no pueden alcanzar los elementos nutritivos contenidos en el protoplasma y protegidos por una membrana celulósica.

El coeficiente de utilización digestiva de las levaduras frescas en el hombre es de un 52 % para el nitrógeno y un 37 % para las calorías, lo que demuestra que en un 50% del nitrógeno y dos tercios de las calorías no son asimiladas por el organismo. Por consiguiente, conviene matar los fermentos de las levaduras por un procedimiento de desecación, que provoque además la ruptura de las paredes celulósicas.

La levadura seca “reventada”, como la levadura de cerveza, no presenta ningún riesgo de fermentación y su digestibilidad es casi total (94% para el nitrógeno y 92% para las calorías), mejorándose también por este procedimiento la utilización de las vitaminas en un 30%.

La levadura de cerveza seca “reventada” por los procedimientos más modernos quedan plasmolizadas y pueden emplearse directamente en la cocina familiar tanto más en la preparación de productos gastronómicos y dietéticos.

La levadura de cerveza tomada diariamente mejora claramente el estado general de salud. Por lo tanto, es un complemento nutricional que se puede considerar de valor energético.

La forma como se presenta normalmente la levadura de cerveza puede ser tanto en copos, en comprimidos o en polvo.

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