Todos sabemos lo importante que es para la salud las frutas y verduras, aunque la mayoría de nosotros parece que nunca come las suficientes.
Una investigación de España muestra que los patrones dietéticos asociados con una alta ingesta de frutas y verduras en las poblaciones del Mediterráneo tienen excelentes beneficios para no sólo adelgazar, sino para mantener el peso perdido.
El estudio analizó las asociaciones entre el consumo de frutas y vegetales y el aumento de peso durante un período de 10 años en una población mediterránea adulta y encontraron que el aumento en el consumo de frutas y verduras estaba ligado con un riesgo significativamente menor de un aumento de peso medio (3,41 kg) más de 10 años. Los investigadores concluyeron que los patrones dietéticos asociados con una alta ingesta de frutas y verduras en la población mediterránea pueden reducir el riesgo a largo plazo de la obesidad entre los adultos. Por lo tanto, las estrategias para aumentar el consumo de frutas y verduras se deben promover más para prevenir y controlar el sobrepeso y la obesidad.
La dieta mediterránea
La mayoría de nosotros sabemos los principales componentes de la dieta mediterránea a parte de las frutas y verduras, pero para aquellos que no estén al tanto les recordamos lo siguiente sobre la dieta mediterránea:
- Consumir una cantidad abundante de frutas y verduras
- Consumir grasas saludables como el aceite de oliva (grasa monoinsaturada que ayuda a reducir los niveles de LDL colesterol)
- Consumir porciones pequeñas de frutos secos (también tienen grasas mono y poliinsaturadas).
- Consumir vino tinto, con moderación. El vino tinto reduce la capacidad de coagulación de la sangre, y también contiene antioxidantes, pero se debe consumir con moderación. Esto significa no más de medio vaso de vino al día para las mujeres (u hombres mayores de 65 años), y no más de un vaso de vino al día para los hombres menores de 65 años.
- Comer muy poca carne roja
- Comer pescado de forma regular
De hecho, muchas de las dietas "saludables" de estos días recomiendan los puntos anteriores. Para muchos es increíble tener que hacerse a la idea de comer frutos secos crudos y aceites como alimentos saludables, pero hoy sabemos que todo es cuestión de que las grasas que usted elija para consumir en su dieta sean las más saludables posibles; y no tanto como las modas de las dietas bajas en grasas de los años 90.
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