La piel es el órgano más extenso de nuestro cuerpo y necesita su cuidado y atención como cualquier otro. Vamos a dar una lista de plantas medicinales para la piel que de seguro nos ayudarán a mantenerla sana.
- Abeto (Picea excelsa). Es especial para eczemas. Se recomiendan sus infusiones para las úlceras atónicas y malignas. El falso abeto (Abies alba) proporciona una trementina que se utiliza para la supuración de los diviesos.
- Acanto (Acanthus mollis, L.). El jugo de esta planta es un remedio eficaz en la psoriasis, eczemas, quemaduras y heridas. La infusión debe ser tibia y de uso externo.
- Acedera (Rumex acetosa, L.). Esta planta es refrescante y depurativa. Muy útil para curar los granos del rostro y de la piel en general así como de todo tipo de erupciones cutáneas.
- Arbol de la Seda o Madorio (Asclepsias gigantea). Esta planta hay que usarla bajo prescripción facultativa, sino puede producir molestias. El uso de 10 a 15 centígramos, es un gran sudorífico y muy útil para curar determinadas enfermedades de la piel.
- Aro (Arum italicum). Las hojas de esta planta se usan como revulsivo machacándolas y aplicándolas sobre la piel aunque con el cuidado de la cataplasma pues puede producir vejigas.
- Barba de capuchino (Cichorium endivia). Es un gran depurativo para los cálculos hepáticos y, como consecuencia, hígado limpio, piel sana.
- Berro (Nasturtium officinale). Los berros tienen numerosas propiedades, pero en cataplasmas son muy buenos para curar las úlceras de la piel.
- Cola de caballo (Equisetum arvense). Debido a su gran poder diurético y depurativo favorece el tener una piel sana y limpia.
- Dulcamara (Solanum dulcamara, L.). Al igual que la cola de caballo, la planta dulcamara es un gran depurativo que mejora los eczemas de la piel.
- Endrino (Prunus spinosa, L.). Tiene excelentes resultados su infusión en hidropesía, obesidad, menopausia y algunas enfermedades de la piel.
- Escabiosa (Knautia arvensis). Se prescribe la infusión de esta planta en el sarampión, leucorrea y en las enfermedades de la piel.
- Escrofularia nudosa (Scrophularia nudosa, L.). Se usa en las heridas escrofulosas, preparándose con las hojas lavadas y machacadas. El cocimiento de hojas y raíz es excelente en la psoriasis.
- Fumaria (Fumaria officinalis, L.). Excelente depurativo. El zumo y la infusión de la fumaria se prescriben en el escorbuto, herpes, sarna y afecciones del hígado.
- Galium (Galium aparine, L.). Su zumo recién exprimido, ingerido durante el día (3 cucharadas soperas) cura los eczemas crónicos y diversas enfermedades de la piel aunque hayan sido rebeldes a otros tratamientos.
- Hierba bruja (Bryphylum Calicinum). Algunos aconsejan la bebida de esta planta para curar erisipelas y erupciones de la piel.
- Pepino (Cucumis sativus). El jugo de pepinos, usado externamente, limpia y blanquea la piel y el cutis eliminando manchas y pecas.
- Remolacha (Beta rapácea). Las hojas frescas untadas con aceite son refrescantes para curar inflamaciones y escoriaciones. Se aplican sobre la zona dolorida.
- Ruda (Ruta graveolens). Se prescribe en polvo para las úlceras malignas, y en aplicaciones tópicas en las contusiones y el reumatismo articular. Se ha de ir con mucho cuidado con esta planta, y las embarazadas no deben tomarla bajo ninguna forma ya que congestiona la matriz, contrae las fibras y puede producir un hemorragia grave.
- Zanahoria (Daucus carota, L.). Las cataplasmas de pulpa de zanahorias calientes calman el dolor y desinflaman forúnculos y quemaduras.
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